Maria Marighella, nieta del guerrillero Carlos Marighella y concejala de Salvador, fue exonerada como coordinadora de la Fundación Nacional de las Artes, Funarte, cuando Dilma Rousseff fue destituida. "Lloré muchas veces cuando vi surgir un Brasil que pensé que habíamos dejado atrás", dice en una entrevista.
"Ver y escuchar al entonces diputado Jair Bolsonaro dedicar su voto al torturador de la mujer que era sujeto y objeto de aquel juicio político, al hombre que comandó el operativo responsable de la detención de mi padre meses antes de mi nacimiento, me dio la dimensión radical que, aunque habíamos hecho mucho, teníamos que ponernos en marcha para restablecer los pactos democráticos en otros marcos".
Ahora, con el Ministerio de Cultura reconstruido como símbolo del giro de la gestión de Bolsonaro hacia el tercer mandato de Luiz Inácio Lula da Silva, del PT, es Marighella quien asumirá la presidencia de la institución de la que fue destituida hace seis años. "Poder mirar esta trayectoria a través de la curva del tiempo y la historia nos da la dimensión colectiva de esta responsabilidad, pero también un valor inmenso".
Actriz graduada en la Universidad Federal de Bahía, Marighella, de 46 años, fue coordinadora de teatro de la Fundación Cultural del Estado de Bahía y Funarte. Cuando la llamaron para asumir el cargo, dijo que sabía que era más una convocatoria que una invitación. "Estamos llamados a actuar en un mundo en ruinas y es ahora que todas las dimensiones de la regeneración deben ponerse en acción".
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA