Fiesta literaria reúne escritores brasileños y extranjeros en ciudad histórica de Río

La Flip ofrece un foco a autores menos conocidos y editoriales aguerridas

"A partir de ahora, la Flip nunca volverá a ser lo que era", asegura Mauro Munhoz, director artístico responsable de la fiesta. "Así como el mundo nunca volverá a ser lo que era en la primera década del siglo. Y menos mal".

Llama la atención cómo la Fiesta Literaria Internacional de Paraty se ha convertido en una criatura diferente en los 20 años que separan la edición que comienza este miércoles (22), y se extiende hasta el domingo (26), de aquella inicial el 31 de julio de 2003.

SAO PAULO/SP, BRASIL. 27.11.2022. Centro histórico de Paraty. (Foto. Zanone Fraissat/Folhapress, ILUSTRADA)

Hoy en día se escuchan muchas quejas, y el propio Munhoz recibe muchas, sobre cómo se redujo la inversión en autores internacionales de gran repercusión. En los primeros seis años de encuentro, para recordar una lista breve, gente como Toni Morrison, Neil Gaiman, J.M. Coetzee, Orhan Pamuk y Salman Rushdie asistieron al evento en la costa fluminense.

"Al principio fue súper importante traer a estos grandes nombres porque ganas un peso", afirma el director. "Luego puedes ampliar el campo de la literatura que, sin aquello, no hubiera sido posible. Las últimas Flips se propusieron explorar cosas que son más difíciles, menos esperadas."

Sin entrar en el mérito de la calidad literaria, actualmente los invitados de la programación principal, especialmente los extranjeros, son figuras menos conocidas que buscan ampliar o encontrar al lector brasileño. Algunas de las apuestas de este año son la ecuatoriana Mónica Ojeda, que profundiza en las angustias de las mujeres jóvenes en ficciones perturbadoras; la estadounidense Christina Sharpe, que reflexiona sobre la revolución lingüística operada por la cultura negra; la española Alana Portero, convertida en fenómeno editorial al navegar la experiencia trans en las periferias de Madrid; y Akwaeke Emezi, novelista que escapa a los géneros binarios y elabora narrativas de formación entre Nigeria y Estados Unidos.

El interés de la fiesta ha sido llevar al centro de atención las literaturas marginadas, ofreciendo foco y micrófono a escritores de todos los rincones, culturas antes ignoradas por el canon y editoriales más pequeñas. Quienes siguen de cerca la evolución de la Flip se acuerdan de las críticas constantes sobre el dominio absoluto de autores de la editorial Companhia das Letras.

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