Odebrecht estima que el Corinthians le debe R$ 800 millones (US$ 213 millones) por la construcción del estadio en el barrio de Itaquera, São Paulo, inaugurado en 2014. Los ejecutivos de la compañía informaron el monto en una reunión en el comité interno del consejo deliberativo del club. No obstante, el club no está de acuerdo con la deuda.
A la cuantía que se debe a la constructora, hay sumarle un préstamo del BNDES con el aval de la Caixa, que hoy ronda los R$ 470 millones (US$ 125 millones), según la empresa. Ya el club calcula que el monto de la deuda con el banco estatal asciende a poco más de R $ 400 millones (US$ 107 millones).
Además de esta cantidad, el año pasado, alrededor de R$ 380 millones (US$ 101 millones) en CID (Certificado de Incentivo para el Desarrollo) fueron pagados a Odebrecht por el fondo que administra el estadio. Los CID funcionan como un incentivo fiscal. Los bonos son emitidos por el ayuntamiento y vendidos en el mercado. Aquellos que compran estos papeles pueden usarlos para el pago de impuestos municipales con descuento.
"El problema es que esta suma no existe, porque incluye intereses. Ah, actualmente el estadio es de R$ 1.3 mil millones (US$ 347 millones), pero esto con un interés de 15 años. En realidad, el número es mucho más bajo", asegura el director financiero del club, Matías Romano Ávila.
Corinthians afirma que algunos artículos que la constructora planeaba entregar no llegaron a construirse, como el piso externo, la colocación de granito y el acabado en el área del restaurante.
Cuando se inauguró el estadio en mayo de 2014, antes del Mundial de Brasil, el presupuesto de la obra ascendía a R $ 985 millones (US$ 263 millones).
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA