Japón une a Ítalo Ferreira con lo inesperado y la gloria. Este martes (27), el surfista brasileño, medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio, vio su tabla partirse por la mitad en la primera maniobra de la final contra el japonés Kanoa Igarashi.
Después de coger la tabla de reserva, logró surfear otras 11 olas y obtener calificaciones que le permitieron ganar a Igarashi. “Sabemos que vamos a dar lo mejor de nosotros, pero en el camino hay varias barreras que superar”, dijo.
En su caso, siempre parece haber un obstáculo adicional que superar. Principalmente en Japón. En 2019, Italo participó en los World Surfing Games en el país, un requisito previo para los Juegos Olímpicos. Llegó a la competición cuando ya había empezado la serie de debut. Cuatro días antes, le habían robado el pasaporte en Estados Unidos. El retraso se debió a los trámites para emitir un nuevo documento y a un tifón, que pospuso su vuelo.
Cuando llegó a la competición, tomó prestada una tabla y se lanzó al mar con los pantalones cortos que llevaba, casi al final de la serie y, contra todo pronóstico, se convirtió en campeón.
En 2021, una tormenta tropical en Japón ha sido la responsable de aumentar casi 2 metros el tamaño de las olas del mar de Tsurigasaki.
Cuando Ítalo salió del agua como el primer medallista de oro de Brasil en Tokio, fue sacado en hombros por la delegación brasileña, mientras, en el cielo, se formó un arco iris.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA