Ya es de esperar por el mercado que la epidemia del coronavirus en China y sus efectos en las finanzas globales reduzcan la actividad económica de Brasil, durante el primer trimestre de este año. Ante estas circunstancias, los analistas ya revisan a la baja las proyecciones del Producto Interior Bruto.
Para llegar a las nuevas previsiones también está siendo sopesado el pobre rendimiento de la industria. Después de crecer un 2.5% y un 1% en 2017 y 2018, respectivamente, la producción cayó un 1,1% en 2019, según informó ayer el IBGE. De los 26 sectores analizados, 16 bajaron, especialmente la minería (-9.7%), influenciados por la tragedia de Brumadinho (MG).
El presidente del Banco Central, Roberto Campos Neto, ya había comentado el mes pasado, en dos eventos, que algunas previsiones del mercado no contemplaban una desaceleración esperada en la industria y un menor impacto en el consumo de la retirada del FGTS.
El brote chino y los malos indicadores refuerzan la percepción de que el Banco Central debería promover, en la reunión que celebrará hoy el Copom, un nuevo recorte en los tipos de interés básicos. Se espera que el índice Selic pase del 4.5% a 4.25% al año.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA