Incluso manteniendo el discurso de que el gasto de emergencia contra la pandemia del nuevo coronavirus se limitará a este año, el gobierno de Jair Bolsonaro ya pronostica que las cuentas públicas extrapolará 2020 y también hará saltar por los aires los cálculos para el próximo año.
En el proyecto LDO (Ley de Directrices Presupuestarias), que debe presentarse antes de este miércoles (15), el Ministerio de Economía solicitará autorización al Congreso para que la meta de déficit fiscal de cara a 2021 sea de al menos el doble de los R$ 68,5 mil millones calculados actualmente.
Un técnico de la cartera que participa en la elaboración del proyecto comentó a Folha que los cálculos ya muestran un agujero de aproximadamente R$ 150 mil millones (US$ 29 mil millones). Los números están siendo analizados por el área económica y aún no son definitivos.
El resultado es un reflejo de la diferencia entre las estimaciones de recaudación y el gasto público del país. Es decir, el Gobierno espera un desajuste aún mayor en las cuentas públicas, que se generará por la pérdida de ingresos y el aumento del gasto.
Para llevar a cabo un cálculo de las cuentas del próximo año, el equipo económico observa parámetros del desempeño de la economía, como el PIB (Producto Interno Bruto) y la inflación. Con ello, proyecta los gastos del año y la cantidad que espera recaudar de los impuestos.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA