Siete de cada 10 brasileños que viven en hogares con algún tipo de precariedad son negros o mestizos, de acuerdo con el informe Síntesis de Indicadores Sociales, del IBGE (Instituto Brasileño de Geografía y Estadística).
El estudio, que se basa en los datos del PNAD (Encuesta Nacional por Muestra de Hogares) 2019, traduce en cifras una realidad ya conocida en las periferias de las grandes ciudades y en las regiones más necesitadas del país.
En Brasil, 45,2 millones de personas (21,6% de la población total) residían en 2019 en 14,2 millones de hogares con algún tipo de insuficiencia. De estos, 31,3 millones eran negros o mestizos, es decir, el 69,2%, según el estudio.
El IBGE considera condiciones inadecuadas la ausencia de cuarto de baño dentro de la vivienda, la existencia de paredes externas con materiales no duraderos, la excesiva densidad de residentes (más de tres convivientes por dormitorio), la sobrecarga del alquiler (comprometiendo más del 30% de los ingresos familiares) y la falta de un documento de propiedad del inmueble.
Si bien los negros y mestizos constituyen el 56,2% de la población del país, en cuatro de las cinco deficiencias detectadas en hogares analizadas por el PNAD, la proporción de población negra que las sufre representa más del doble que la de blancos.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA