El gobierno Bolsonaro modera el discurso sobre licencias ambientales tras la tragedia de Brumadinho

Durante y después de la campaña, Jair Bolsonaro (PSL) repitió varias veces que pretendía revisar las reglas de licenciamiento

Brasília

Después de la tragedia de Brumadinho (MG), el Gobierno Federal comenzó a moderar su discurso crítico sobre el licenciamiento ambiental y defiende ahora facilitar licencias sólo para emprendimientos de bajo impacto. Durante y después de la campaña, Jair Bolsonaro (PSL) repitió varias veces que pretendía revisar las reglas de licenciamiento.

"Esa cuestión de licencia ambiental entorpece cuando un alcalde, gobernador, presidente, quiere hacer una obra de infraestructura", dijo Bolsonaro en diciembre.

A Folha, el ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, dijo que la propuesta es facilitar el licenciamiento de actividades de menor impacto y citó como ejemplo al sector agropecuario, al que bastaría una autodeclaración. Salles fue apoyado por el sector agroindustrial en el Congreso.  

El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles - REUTERS

Tales declaraciones también son repetidas por otros ministros. Salles, sin embargo, niega que haya un cambio en el discurso gubernamental y dice que las palabras del presidente fueron mal interpretadas.

El argumento de Salles para la propuesta de flexibilización es que el cambio facilita el camino de profesionales a la hora de solicitar licencias consideradas de medio y alto riesgo. Tal medida, no obstante, tendría poco efecto en la actuación del Ibama, que es responsable, en la gran mayoría de los casos, de conceder licencias de construcciones complejas, de gran porte y de mayor impacto, como hidroeléctricas y líneas de transmisión.

Los miembros del Gobierno en el área ambiental opinan que la tragedia de Brumadinho tendrá como consecuencia una moderación del Planalto en cuanto a las críticas sobre la fiscalización ejercida por el Ibama.

El ministro destacó que hay más de 700 represas en funcionamiento en situaciones análogas, que tienen que ser fiscalizadas urgentemente en Brasil.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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