La gestión de Bolsonaro promete liberar la formación en casa a través de una medida provisional

La práctica había sido considerada ilegal por el Supremo por falta de regulación

El gobierno del presidente Jair Bolsonaro (PSL) incluyó en la lista de metas para los cien primeros días de gobierno la regulación de la enseñanza en casa, también llamada 'homeschooling', a través de medida provisional.

A finales del año pasado, la práctica había sido considerada ilegal por el STF (Supremo Tribunal Federal). En la época, la mayoría de los magistrados entendió que, por falta de una marco legal, no podía considerarse un medio lícito para garantizar el derecho de los menores a la educación.

Con la medida provisional, se regulará la situación de las familias que educan a sus hijos en casa. Según la estimación divulgada el año pasado por la Aned (Asociación Nacional de Educación Domiciliaria), estas suman cerca de 7.500. Parte de este grupo está compuesto por personas que discrepan de la línea educativa ofrecida en los centros docentes, por motivos religiosos.

Ya educadores contrarios a la medida citan la asistencia a los centros docentes como un derecho del niño y enfatizan la escuela como un espacio importante de socialización.

Aned afirmó el miércoles que ayudó a redactar el texto de la medida provisional junto al gobierno de Bolsonaro.

El colectivo asegura que en diciembre mantuvo un encuentro con el ministro de Educación, Ricardo Vélez Rodríguez, para colaborar en la edición de la MP. Posteriormente, asesores de la cartera habrían explicado que el tema está más relacionado con el área de derechos humanos y familia que con el área de educación formal.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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