La madre que ya perdió dos hijos busca un tercero en el lodo de la represa

Robert, de 19 años, trabajaba subcontratado en la mina de la Vale. Era su primer empleo

Brumadinho

​El año pasado, cuando Iolanda de Oliveira Silva, de 48 años, visitó los escombros de Bento Rodrigues, distrito de Mariana (MG) afectado por el rompimiento de la represa de Samarco, en 2015, no podía imaginar que su familia sería víctima de la segunda tragedia de este tipo.

"Colchones encima de la azotea, cochecito de bebé .... Nunca pensé que pasaría por esto. Es un dolor insoportable. Un dolor que no hay dinero que lo pague", explica sobre la destrucción que vio allí. Pero todo en la vida de Iolanda llegó sin previo aviso. En 2005, perdió a su primer hijo, Michael Felipe, de 16 años, que murió 19 días después de descubrir que padecía leucemia.

Iolanda de Oliveira Silva perdió a su hijo en la tragedia de Brumadinho (MG)

Hace 15 días, Iolanda paró de llorar la muerte de su segundo hijo, Richard, de 19 años, asesinado hace tres meses. Todavía viviendo el luto, se aguantó el llanto por su otro hijo, el hermano gemelo Robert.

El viernes (25), Robert, también de 19 años, preparó una maleta pequeña para pasar el fin de semana en casa de la novia.

Rezó, pidió bendición y salió a las 6h35 hacia la mina del Córrego de Feijão, de la empresa minera Vale, donde llevaba siete meses trabajando como subcontratado. Era su primer empleo.

Iolanda no guarda la esperanza de encontrarlo con vida. El martes (29), se sintió indispuesta en otra visita al centro que Vale montó en Brumadinho (MG) para atender a las familias de las víctimas del rompimiento de la represa.

El miércoles (30), el número de muertos había llegado a 99 y continuaban 259 personas desaparecidas bajo el lodo de Brumadinho (MG), donde una represa de la compañía Vale se rompió, provocando una riada de 13 millones de metros cúbicos de desechos de mineral de hierro.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

Lea el artículo original