Después de siete horas, la cirugía de reconstrucción del tránsito intestinal, a la que fue sometido Jair Bolsonaro, fue concluida la tarde del lunes en el Hospital Albert Einstein, en São Paulo.
El procedimiento -iniciado a las 8.30 y concluido a las 15.30 fue "un éxito", según la Secretaría de Comunicación de la Presidencia de la República, aunque duró más de lo previsto inicialmente (unas tres horas).
La gran cantidad de adherencias (partes del intestino que se quedan pegadas) llevó al equipo médico a cambiar la técnica quirúrgica, ejecutando un procedimiento más complejo de lo que se esperaba.
La opción más simple era reconectar las dos puntas del intestino grueso, que estaban separadas, para que el tránsito intestinal volviera a la normalidad.
La otra, que tuvo que ser adoptada, exigió la unión de una parte del grueso con el delgado. Para ello, la parte del intestino grueso que estaba conectada a la bolsa de colostomía fue retirada.
La intervención fue recomendada por los médicos que detectaron que había muchas adherencias y lesiones producidas por la puñalada que sufrió el mandatario durante un acto de campaña electoral. Bolsonaro ya se había sometido a dos cirugías anteriormente.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA