El presidente Jair Bolsonaro (PSL) rompió su silencio y minimizó el jueves los efectos de la filtración de mensajes del ministro Sergio Moro (Justicia) en los que intercambia colaboraciones con el fiscal Deltan Dallagnol, en el marco de la Operación Lava Jato.
"Lo que [Moro] hizo no tiene precio, él realmente mostró las vísceras del poder, la promiscuidad del poder en cuanto a corrupción", dijo el presidente tras un evento en el Palacio del Planalto.
"Petrobras casi quebró, los fondos de pensiones quebraron, el propio BNDES - he hablado de eso aquí-, en la época R$ 400 mil millones y algo fueron entregados a compañeros comunistas y amigos del rey", concluyó Bolsonaro sobre el legado del ministro de Justicia y ex juez federal.
Bolsonaro dijo además que Moro "forma parte de la historia de Brasil" y afirmó que las pruebas contra el expresidente Lula, detenido tras la investigación de la Lava Jato, no fueron pruebas forzadas.
Asimismo, cuestionó la veracidad del intercambio de mensajes publicados el pasado domingo (9) por el sitio de noticias The Intercept Brasil. Y dijo que si sus conversaciones privadas llegan al público, él mismo también será criticado.
"Si filtran el mío [celular], hay muchas bromas que hago con colegas, entonces me llamarán de nuevo de todo lo que me llamaron durante la campaña. Hubo una filtración delictiva, una invasión criminal, tanto si lo que está siendo filtrado es verdad o no".
Al ser preguntado si considera normal que un juez y un fiscal hablen sobre una investigación en curso, devolvió la pregunta sobre si lo normal es "hablar con cambistas".
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA