Después de la filtración de mensajes, el gobierno de Bolsonaro se blinda y muestra cautela en relación a Moro

El Gobierno quiere evitar movimientos prematuros antes de conocer la dimensión completa del caso

Brasília

Jair Bolsonaro (PSL) se muestra cauteloso ante las filtraciones de conversaciones de Sergio Moro con Deltan Dallagnol. El gobierno quiere evitar movimientos prematuros, antes de conocer la dimensión completa del caso.

Aunque aliados del presidente han defendido al ministro de Justicia, los asesores le recomendaron guardar silencio hasta la revelación de nuevas partes de los diálogos entre el exjuez de la Lava Jato y miembros de la investigación de la operación.

El fiscal de la Lava Jato Deltan Dallagnol y el ministro de Justicia, Sergio Moro - Montagem/Eduardo Anizelli/Folhapress e Agência Brasil

El Planalto declaró que Bolsonaro no se pronunciaría sobre el episodio, que vio la luz el domingo (9) a través del sitio de noticias Intercept. Un portavoz dijo que el presidente conversaría personalmente con Moro antes de dar declaraciones.

La situación fue discutida por el presidente del Senado, David Alcolumbre (DEM-AP), el presidente del Supremo Tribunal Federal, Días Toffoli y el presidente de la Cámara de los Diputados, Rodrigo Maia. 

La cúpula del Congreso dice que existe la posibilidad de establecer una CPI y pronostica una fuerte agitación política.

Moro y fiscales no niegan el contenido de las conversaciones, pero consideran su divulgación un "ataque criminal a la Lava Jato".

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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