Durante la reunión que precipitó la salida de Sergio Moro del gobierno de Bolsonaro se escucharon al menos 37 palabrotas, 29 de ellas pronunciadas por el jefe del Ejecutivo, insultos a gobernadores, amenazas a políticos, ofensas al Tribunal Supremo y la confirmación de que Jair Bolsonaro quería interferir en la Policía Federal.
La publicación del vídeo de la reunión del Consejo de Ministros, del 22 de abril, fue autorizada ayer por el magistrado Celso de Mello, instructor en el STF de la causa del exministro de Justicia contra el mandatario.
En el video, Bolsonaro muestra gran preocupación ante la posibilidad de ser destituido, revela que tiene un sistema de información "propio", al margen de los organismos oficiales, refuerza su deseo de interferir en la policía para proteger a familiares y amigos, y usa repetidamente la palabra "mierda".
Exige la lealtad de sus ministros con vehemencia, mencionando varias veces el riesgo de sufrir un impeachment y amenaza con rupturas institucionales al referirse a algunas acciones del Tribunal Supremo. También defiende armar a la población para que pueda reaccionar frente a las decisiones de las autoridades locales que el presidente considera dictatoriales.
El tono ofensivo es imitado por ministros. Por su parte, Abraham Weintraub (Educación) llama "sinvergüenza" a los magistrados del Supremo y Damares (Derechos Humanos) sugiere la detención de gobernadores y alcaldes que, contra la pandemia, toman medidas que ella considera arbitrarias. Ya Paulo Guedes (Economía) pide que el Banco do Brasil, entidad pública, sea vendido.
El contenido de la reunión será analizado por el fiscal general, Augusto Aras.
Vea el vídeo: