El presidente Jair Bolsonaro aprovechó este domingo (12) las inundaciones que azotan el sur de Bahía para atacar las restricciones a la circulación decretadas por los gobernadores en la lucha contra la transmisión del nuevo coronavirus.
Según la Superintendencia de Defensa y Protección Civil de Bahía, ha habido al menos 5 muertos y 175 heridos como consecuencia de la anegación de varias localidades. Las crecidas afectaron a casi 70.000 personas y dejaron a 6.472 evacuados y 3.744 sin hogar.
Consultado sobre la ayuda del Gobierno Federal a las familias que perdieron sus hogares y negocios, el presidente aprovechó la oportunidad para comparar la tragedia con los efectos económicos provocados por las medidas restrictivas. "También tuvimos una catástrofe el año pasado, cuando muchos gobernadores, y gente de Bahía, cerraron todos los comercios y obligaron a la gente a quedarse en casa. Gente, en gran parte [trabajadores] informales, condenados a morir de hambre", dijo durante una entrevista en Porto Seguro (BA), donde desembarcó tras sobrevolar la región afectada.
"El Gobierno se sensibiliza con este problema. Pedimos la colaboración de todos para superar este problema y tampoco destruimos la economía en nombre de lo que sea. Aunque respetamos y entendemos la gravedad que ha supuesto este virus en Brasil", declaró el presidente.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA