Aproximadamente 4 de cada 10 brasileños piensan que el gobierno de Jair Bolsonaro (PL) incentiva en lugar de combatir las ilegalidades en la Amazonia, como la acción de cazadores y pescadores ilegales, la invasión de tierras indígenas, la deforestación y la minería clandestina, temas que han cobrado especial destaque por el asesinatos del indigenista Bruno Pereira y del periodista Dom Phillips.
Una encuesta de Datafolha realizada el miércoles (22) y el jueves (23) mostró que entre el 39% y el 43% de la población ve al actual presidente como una política de estímulo más que de enfrentamiento de problemas. La administración de Bolsonaro es criticada por el desmantelamiento de órganos y la falta de acción en la región.
Por otro lado, un porcentaje que va del 31% al 35% considera lo contrario en cuanto a los temas del cuestionario. Cerca de 3 de cada 10 personas piensan que el gobierno combate más que incentiva la delincuencia en el territorio amazónico en general y en las comunidades indígenas.
La porción neutral, de los que dicen que Bolsonaro no alienta ni reprime los delitos, oscila entre el 8% y el 10%, y los que no saben opinar sobre los temas corresponden a algo entre el 13% y el 18%.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA