Niñas y adolescentes negras representan alrededor del 40% de los casos registrados de violación en Brasil, con el doble de incidencia en comparación con las menores blancas.
Esto a pesar de que representan solo el 13% de la población, según el Censo de 2022.
Los datos son de un estudio del Núcleo de Estudios Raciales del Insper, basado en los datos del Sistema Nacional de Atención Médica del Ministerio de Salud.
El estudio también señala que 6 de cada 10 registros de violación en el país involucran a niñas menores de 18 años y que la proporción de mujeres negras y mestizas de todas las edades víctimas de este tipo de crimen ha aumentado en los últimos años.
Si en 2010, el primer año analizado por los investigadores, 3 de cada 10 víctimas de violación reportadas eran menores negras, en 2022 (el último año analizado) el número subió a 4 de cada 10.