El miércoles (5), el ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, enfrentó una protesta de buscadores ilegales de minerales durante una visita a Jacareacanga (PA), a 1.695 km de Belém. Acudió a la región para supervisar una operación del Ibama contra yacimientos ilegales, en la tierra indígena de Munduruku (TI).
Las imágenes que circulan por las redes sociales muestran a mineros no indígenas y a mundurucus cerrando la pista del aeropuerto de Jacareacanga, tras la salida de Salles, que visitó la zona acompañado por un grupo de periodistas.
Uno de los mineros grabó un video frente al avión de la Fuerza Aérea en el que dice que "el minero hace cosas por los indígenas de la zona". Según un estudio elaborado por la ONG Greenpeace, la región del Alto Tapajós, donde se encuentra la TI Munduruku, concentra el 60% de la destrucción causada por la minería en todo la Amazonia en los últimos 12 meses.
La actividad ilegal se lleva a cabo mediante PC (retroexcavadoras), que destruyen rápidamente los arroyos y ríos de la región, devastando los bancos fluviales, arrojando toneladas de desechos y alterando los cursos de agua.
Los mineros tenían conocimiento de la operación del miércoles desde ya era conocida el domingo, cuando webs de la región informaron sobre la llegada a Jacareacanga de personal militar que combate delitos ambientales en el marco de la Operación Verde Brasil 2, junto al Ibama.
Para Greenpeace, el aumento de la minería ilegal en la región está relacionado con las promesas del presidente Jair Bolsonaro de legalizar la actividad en tierras indígenas.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA