La futura ministra de Agricultura del gobierno Bolsonaro, Tereza Cristina (DEM-MS), concedió incentivos fiscales a la JBS en la misma época en la que hizo negocios con la empresa. La diputada alquilaba una propiedad a los hermanos Batista (propietarios de la compañía) mientras era la secretaria estadual que cuidaba de la agroindustria en Mato Grosso do Sul.
Algunos documentos firmados por Tereza fueron entregados en el marco del acuerdo judicial al que llegó la empresa y que fue homologado por el STF (Supremo Tribunal Federal). Los papeles hacen referencia a la concesión de incentivos fiscales del Estado al gigante de la alimentación, a cambio de comisiones ilegales, en 2013, durante el gobierno de André Puccinelli (MDB-MS), detenido en julio bajo acusación de corrupción.
De acuerdo con las diligencias, en un período de 13 años, hasta 2016, habrían sido pagados hasta R$ 150 millones (US$ 39,7 millones) en comisiones ilegales.
En 2011 y 2012, Tereza llevó a cabo un negocio particular con los Batista, el arrendamiento de una hacienda para la cría de ganado en el municipio de Terenos (MS). La negociación fue difícil y actualmente la JBS le reclama R$ 14 millones (US$ 3,7 millones) en la Justicia.
Según el abogado de Tereza, no hay relación entre los hechos. JBS prefirió no manifestarse.
Después de la publicación del artículo, el presidente electo minimizó el caso: "Yo también soy reo en el Supremo, ¿y?". Bolsonaro fue denunciado por incitación a la violación.
"Después de todo, soy un ser humano, puedo equivocarme, y si sobre cualquier ministro recae una acusación grave y comprobada, tomaremos una providencia. En este momento, ella goza de toda nuestra confianza", dijo Bolsonaro.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA