En un acto con el que intentó responder a las investigaciones en su contra, el expresidente Jair Bolsonaro (PL) reunió a miles de partidarios en la Avenida Paulista, en São Paulo, y pronunció un discurso en el que moderó sus ataques contra el Supremo Tribunal Federal.
Desde un escenario móvil y junto a aliados como el gobernador Tarcísio de Freitas (Republicanos) y el alcalde Ricardo Nunes (MDB), afirmó buscar la pacificación del país y pidió amnistía para los detenidos por el ataque golpista del 8 de enero de 2023.
Bolsonaro criticó al Tribunal Superior Electoral por declararlo inelegible y por el "abuso de algunos que traen inseguridad para todos nosotros". Criticó al gobierno de Lula (PT) sin mencionar el nombre del presidente.
Negó su participación en un complot golpista. "¿Qué es un golpe? ¿Es un tanque en la calle, es un arma, una conspiración? Nada de eso se hizo en Brasil", dijo. "¿Ahora el golpe es porque hay un borrador de decreto de estado de defensa? Por favor".
Al igual que muchos de sus partidarios, Bolsonaro exhibió una bandera de Israel. También estuvieron presentes los gobernadores Romeu Zema (MG), Jorginho Mello (SC) y Ronaldo Caiado (GO).