Un vistazo a la lista de marcas presentes en la Semana de la Moda de São Paulo, que comienza este miércoles (8), muestra muchos nombres desconocidos por el público. Se trata de marcas que producen piezas exclusivas por encargo, como Renata Buzzo y sus vestidos obras de arte, o para una clientela muy específica, como Bold Strap y su moda queer de camisetas sin mangas semitransparentes y arneses de cuero sexualmente atractivos.
De las 38 marcas listas para adueñarse de las pasarelas del shopping Iguatemi, del Komplexo Tempo y de algunos locales externos de la capital paulista, sólo un puñado ya ha reventado la burbuja fashionista, como Handred, la marca carioca, con Tiendas en la calle y en varios centros comerciales.
En su 56ª edición, la Semana de la Moda de São Paulo vive un momento en el que algunas marcas que alcanzaron el estrellato gracias a sus pasarelas ahora le dan la espalda, como es el caso de la súper publicitada Misci, que presentó su nueva colección en una desfile independiente. Pero esto no excluye la existencia de una línea de marcas más pequeñas ansiosas por mostrar sus looks en el evento de moda nacional más visible: en esta edición, todos los desfiles son presenciales.
El deseo de ser parte de ella, dice Paulo Borges, fundador de la semana de la moda, surge porque "la pasarela sigue siendo el gran lugar de la narrativa y los desfiles son auténticos".