El Senado aprobó el miércoles (7) un reajuste salarial, de R$ 33,7 mil (US$ 9 mil) a R$ 39,3 mil (US$ 10,45 mil), para magistrados del Supremo Tribunal Federal. La medida, que depende ahora de la sanción del presidente Michel Temer, provocará un impacto anual en las cuentas públicas de R$ 4 mil millones (US$ 1 mil millones), según los cálculo de las consultorías de Presupuesto de la Cámara y del Senado.
El aumento para los magistrados genera un efecto cascada, ya que su remuneración es el valor límite para los salarios del funcionariado. Además, algunas categorías tienen pagos vinculados a los de los magistrados.
Esta fue la primera de las llamadas pautas-bomba enfrentadas por el presidente electo, Jair Bolsonaro (PSL).
El capitán retirado había dicho, antes de la decisión de los senadores, que no era el momento de reajustar los salarios del Poder Judicial. "Estamos terminando un año con déficit, vamos a empezar el otro con déficit", dijo Bolsonaro, al dejar el encuentro con el mando de la Aeronáutica, en Brasilia.
El presidente del Senado, Eunício Oliveira, aprobó la petición para incluir el asunto en la agenda del día siguiente.
El proyecto aprobado por la Cámara llevaba parado en el Senado desde 2016.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA