Lula pidió a Odebrecht que hiciera un proyecto en Cuba, según Marcelo Odebrecht

En una entrevista, el empresario declaró que el expresidente pensó al principio en una carretera, pero la compañía descubrió que era mejor invertir en un puerto

São Paulo

El empresario Marcelo Odebrecht, de 51 años, endereza milimétricamente el cuadro colgado en la pared de la estancia escogida para ofrecer esta entrevista. El cuadro es una imagen de una gran raíz encontrada por su abuelo y fundador de Odebrecht, Norberto, en una playa en el sur de Bahía en la década de 1970. La raíz está en un pedestal en la sede de la compañía en Salvador.

"Una raíz que superó su fragilidad, más allá de la adversidad del entorno donde había caído, encarnaba la resistencia que todos necesitamos tener, especialmente ahora", dice.

Marcelo dice que la foto debería ser una inspiración para las personas de la empresa. Entonces, decidió colgarlo en ese lugar, una especie de sala de estar de su casa, de São Paulo.

Localizada en una urbanización cerrada, es la última casa de la calle. El salón tiene techos altos y las puertas corredizas de vidrio llevan a una piscina.

Marcelo Odebrecht (Foto: Eduardo Knapp/Folhapress, MERCADO). - Folhapress

En un área separada, que se accede por el garaje , el ejecutivo mantiene un despacho sencillo con una mesa y sillas de madera, y un sofá.

El grupo bahiano fue fundado en 1944, ha llegado a obtener ingresos de R$ 132 mil millones (US$ 32 mil millones) y empleado a 193.000 personas. Sin embargo, desde que se puso en marcha la Operación Lava Jato, la compañía enfrenta dificultades y actualmente se encuentra en una de las mayores recuperaciones judiciales de la historia del país, con deudas que alcanzan los R$ 98,5 mil millones (US$ 23 mil millones).

Marcelo aceptó ofrecer la primera entrevista desde su ingreso en prisión el 19 de junio de 2015. Se negó a hablar sobre la Lava Jato y cuestiones políticas, pero dio detalles de los acuerdos que se hicieron  por detrás que ilustran los vínculos entre el poder económico y político. Confirma, por ejemplo, que Odebrecht actuó para incluir a Venezuela en el Mercosur por interés comercial.

El empresario firmó un acuerdo de colaboración judicial y salió de prisión en diciembre de 2017 para cumplir arresto domiciliario haciendo uso de una tobillera electrónica. En diciembre de este año, logró el grado semiabierto, no obstante, continúa con la tobillera.

Se ocupó de la expansión latina del grupo y temas relacionados con el financiamiento de exportaciones de servicios por BNDES (Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social). Él es categórico al decir que no hay una caja negra de BNDES, pero dice que la compañía se fue a trabajar a Cuba tras el pedido del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

"Nuestra relación con el BNDES siempre ha sido, y espero que siga siendo, una gran asociación, basada en la transparencia y la equidad. Y puedo decir con mucha seguridad que no soy consciente de que haya habido algún acto ilegal en nuestra relación con el BNDES", dice.

La defensa de Lula declaró que el petista nunca cometió un acto ilegal, dentro o fuera del gobierno.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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