Brasil tenía 10,9 millones de jóvenes de 15 a 29 años que no estudiaban ni estaban ocupados con trabajo en 2022, según datos divulgados este miércoles (6) por el IBGE (Instituto Brasileño de Geografía y Estadística).
El número correspondía al 22,3% de la población estimada en ese rango de edad (48,9 millones). De acuerdo con el IBGE, la falta de estudio y trabajo afecta principalmente a las mujeres negras o mestizas de 15 a 29 años. Este grupo estaba compuesto por 4,7 millones el año pasado, o el 43,3% del total de jóvenes alejados de las actividades educativas y laborales (10,9 millones). Le seguían los hombres negros o pardos (2,7 millones o el 24,3%), las mujeres blancas (2,2 millones o el 20,1%) y los hombres blancos (1,2 millones o el 11,4%).
Estos datos forman parte de la Síntesis de Indicadores Sociales. La publicación analiza estadísticas de fuentes como la Pnad Contínua (Encuesta Nacional por Muestra de Domicilios Continua), también elaborada por el IBGE.
El joven que no trabaja ni estudia suele ser llamado "ni-ni" en diferentes estudios. Sin embargo, el IBGE evita usar ese término porque una parte de este grupo puede realizar actividades no remuneradas en el hogar sin necesariamente estar ocupado una plaza de empleo.