La OEA se muestra preocupada por el futuro de los derechos humanos en Brasil

Brasil ya ocupó un lugar de referencia en la promoción de derechos humanos, sin embargo, actualmente vive una reducción de esas garantías

Júlia Barbon
Rio de Janeiro

Brasil ya ocupó un lugar de referencia en la promoción de derechos humanos, sin embargo, actualmente vive una reducción de esas garantías. Esta fue la conclusión a la que llegó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA (Organización de los Estados Americanos) tras una semana de visitas a diversos estados del país.

"Brasil se consolidó como un país de referencia sobre políticas de derechos humanos, políticas de infancia, que se constituyeron a través de distintos gobiernos, como un compromiso de estado", dijo Antonia Urrejola, relatora para Brasil. "Pero la comisión tristemente identificó una reducción de la intensidad de esa dinámica".

Visita de la CIDH al Centro de Socioeducación Don Bosco, en Río de Janeiro, el 10 de noviembre de 2018 - Francisco Proner/ FARPA / CIDH

La comisión divulgó un informe preliminar con recomendaciones sobre lo que vio. Destacó violaciones a indígenas, quilombolas, sin techos, trabajadores rurales, presos y habitantes de favelas y periferias, además de inmigrantes, transexuales, defensores de los derechos humanos y prensa.

Se visitaron estados como Minas, Pará, São Paulo, Maranhão, Roraima, Bahía, Mato Grosso do Sul y Río de Janeiro. Es la segunda vez que la comisión viene a Brasil, a pesar de hacer un monitoreo constante a distancia. La primera fue en 1995.

En el campo de la libertad de expresión, la delegación subrayó los ataques recientes a la prensa durante el período electoral, condenó los " discursos de intolerancia y odio contra minorías" y criticó la criminalización de movimientos sociales a través de la ley antiterrorismo.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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